Mi locura
el amor adquirió alas para volar con
rumbo a tu corazón, más que un sueño
eres la razón de mis días.
Es difícil el olvido cuando la música
me acompaña, al llegar los aromas
de las flores que tanto nos gustaban,
sentir llegar tus caricias en el viento.
Construí un paraíso con castillos y hadas
con la imaginación para lograr congelar
las lágrimas que te acompañaban, además
observar tu sonrisa con la luz de la luna.
Te confieso que mi locura me convierte
en un guerrero, busco triunfar en la
historia de un pasado que aún está
presente, delirar un futuro a tu lado.
Al final de todo soy feliz, está tatuado
tu recuerdo en el alma, la tormenta
es amiga, dejó de crear daño para
otorgar poderío para el encuentro.
Gustavo Huerta
G. H.