A cada uno de mis hijos
Desde la profundidad de mi silencio
Con la mirada cálida y dejando
Por la ventana entrar el aire fresco…
Con la caricia porque sí a cada momento
Con las charlas inolvidables en la cama
Con el aroma en la cocina del almuerzo
Con la música sonando en las mañanas
Permíteme decirte que te amo
Disfrutando cada instante de tu vuelo
Y llorando a escondidas sin consuelo
Cuando las piedras quiebran tu aleteo
En el beso, en la sonrisa, en el abrazo
Y al soltar tu mano… en el respeto
De verte haciendo tu camino
Dando, si necesitás, algún consejo
Permíteme decirte que te amo
Con la fé puesta en cada rezo
Pidiéndole a Dios que guíe tus pasos
Por el camino que para vos sea el correcto…
Que no hay en mí amor más puro y más completo
Que verte navegar… eligiendo cada puerto.
