La poesía
Si la vida viniera con suerte
espero que mi suerte seas tú.
Si la noche tiñese tu pelo
y el mar alcanzara tus pies,
huérfanos de las rarezas bellas
tus ojos serían estrellas
que delatan la ciudad de mi ser.
Si la poesía fuese mujer,
si la mujer fuese una diosa
y bebiera a mi salud una copa de vino,
fuese tu boca una diosa que vino
a musitar en mi oído una bella canción.
Carlos Enrique Soto